La empresa Consorcio Credicard se enfrentaba hace meses a importantes necesidades documentales. Hoy, sus problemas han sido resueltos gracias a las soluciones de DocPath, implementadas por su socio Novatec en Venezuela.
Con más de veintitrés años en el mercado venezolano, la empresa Consorcio Credicard se ha constituido como un referente en ese país en el área de procesamiento de medios de pago electrónicos para bancos y otras instituciones financieras. Tanto es así, que actualmente presta servicio a más de una veintena de entidades en Venezuela, el 70% de la banca del país.
Pero precisamente esta amplia actividad comercial derivó con los años en una compleja labor de gestión documental. Fue entonces cuando nacieron las principales necesidades de Credicard en materia de tecnología documental. Por una parte, la compañía tenía que dar respuesta a las demandas de los clientes, que exigían información de manera rápida y ágil. Por otra parte, los procesos de gestión de documentos requerían una solución que permitiera digitalizar los archivos y que generara rapidez y agilidad en el proceso.
«El proyecto surgió por diversas necesidades: modernizar los productos hacia una arquitectura SOA, brindar un servicio más rápido y seguro, y generar valor mediante la reducción de costes de papel y de procesos”,
explica Alberto Roa, vicepresidente de Proyectos de Consorcio Credicard.
DocPath entra en juego
Identificadas las necesidades, la elección del proveedor no tardó en llegar.
«Nos decidimos por DocPath por lo versátil de la aplicación, lo rápido de su implementación y el respaldo local”,
apunta Roa, que añade:
“Precisamente, esa presencia local a través de Novatec, que tiene un conocimiento profundo del mercado, situó a DocPath en una posición favorable con respecto a otros proveedores”.
De este modo, DocPath aportó formación y soporte durante todo el proceso, mientras que Novatec facilitó la implantación de las soluciones para agregar valor a los clientes de Credicard. Por la naturaleza del negocio, fueron dos las soluciones de DocPath elegidas para el proyecto. La primera, Aspen, un gestor documental que posibilita el almacenamiento de los datos de negocio y las plantillas independientemente, de modo que se genera el documento en tiempo real. La segunda solución implantada, High Volume, permite a las aplicaciones batch generar altos volúmenes de documentos para una amplia variedad de formatos de salida, tanto electrónicos como de impresión.
«Necesitábamos una solución que nos permitiese la generación de documentos en tiempo real, como los estados de cuenta de los propietarios de tarjetas de crédito. Por el volumen de documentos que teníamos que digitalizar, la mejor elección fue Aspen y High Volume”,
indica el responsable de Proyectos de Consorcio Credicard.
Una eficaz puesta en marcha
Una vez elegidas las soluciones que responderían a las demandas de Credicard, sólo quedaba iniciar la implementación, a través del apoyo directo de Novatec.
«El compromiso de Novatec es entregar a nuestros clientes soluciones completas, desde la definición del proyecto hasta su post implementación. Gracias a nuestra amplia experiencia en el área de gestión documental y a los productos líderes de DocPath, ha sido posible llevar a cabo el proceso con éxito”,
apunta Leonardo González, director de Novatec.
Así, meses después del trabajo conjunto y tras una inversión cercana a los 85.000€, las soluciones de DocPath están ya instaladas en un servidor IBM Blade HS22 basado en Intel, con apoyo de la base de datos Oracle. El servicio de digitalización está conectado por Web Server con el site de Credicard, cerca de dieciocho bancos y decenas de miles de usuarios directos están vinculados con las aplicaciones y, en total, la compañía venezolana emite aproximadamente dos millones y medio de estados de cuenta.
Menos impresiones, más ahorro
Con todas las dificultades superadas, los beneficios se hicieron patentes. El programa de “cero papel”de Credicard, con ayuda de las soluciones DocPath, ha conseguido que en el primer mes se hayan realizado 90.000 impresiones menos, y hasta 160.000 menos durante el tercer mes. Para finales de año, el objetivo es reducir las impresiones hasta un 60%, con un total de 600.000 menos. Este ahorro de papel, además, tiene un efecto directo en la inversión económica. Y es que, según cálculos de la compañía, el ahorro económico durante el primer mes pudo ascender hasta los 10.000 euros, y a los 18.000 euros en el tercer mes.
«Estamos sumamente satisfechos con el retorno de inversión obtenido, ya que, gracias a la alta aceptación de nuestros clientes, el plazo de recuperación del capital será de diez a doce meses, es decir, una disminución del 50% con respecto al cálculo inicial”,
opina Alberto Roa.
Los beneficios asociados al proyecto han hecho que, desde Credicard, se prevea ampliar los proyectos de tecnología documental a diversas áreas en un futuro próximo.
«Si a las ventajas anteriores sumamos la capacidad de mejorar el servicio, reducir los riesgos, ahorrar costes, disminuir futuros incrementos de precios y llegar más rápido a las necesidades de información, podemos concluir que, con este proyecto, hemos agregado valor a nuestros clientes, los bancos, y ellos, a su vez, a los suyos”,
concluye Roa.